Registros médicos del Ejército que se remontan a la Guerra de la Independencia muestran importantes pérdidas de soldados debido a enfermedades venéreas. En un período de dos años durante la Guerra Civil, el Ejército de la Unión documentaó 100.000 casos de gonorrea. Por motivos de seguridad nacional, el ejército empezó a distribuir preservativos y a hacer un agresivo marketing para concienciar a sus tropas durante el siglo XX.