El censo realizado en Brasil ha sacado a la luz que unos 43.000 niños con menos de 14 años de edad viven emparejados con un compañero. Aunque ello supone una violación de las leyes del país, que consideran este tipo de enlaces como un abuso,las uniones con menores proliferan. De hecho, no es extraño que muchas familias soliciten permiso judicial para maridar a hijas de menos de 14 años, según informó una titular brasileña de la justicia juvenil. Con frecuencia los familiares no saben que tales acciones infringen la ley.