Un equipo de científicos de la Universidad Dokuz Eylül de Esmirna (Turquía) pretende patentar un invento que permite alargar los huesos de la pierna un máximo de veinticinco centímetros. El invento consiste en una serie de tornillos que se introducen en la tibia o el fémur y fuerzan un estiramiento del hueso de forma gradual de dos modos distintos.