Publicado hace 11 años por --80001-- a historiasdehispania.blogspot.com.es

Entre dos de estas ciudades se produjo, y es la anécdota de da pie a este post, el regalo quizás más extraño que jamás se han hecho dos ciudades: una olla de sopa caliente. Regalo extraño, sí, pero de un simbolismo casi estremecedor.La ciudad libre de nuestro relato es Estrasburgo.Estamos en 1262. De Geroldseck, que ya poseía extensas tierras en la zona, había puesto sus ojos en Estrasburgo, y decidió reclamar la ayuda de la Iglesia para tomarla como suya.

Comentarios

D

Excelente historia.

D

Mejor que una olla de mierda.