Muchos consumidores decidimos el coche que nos compramos en función de nuestros gustos y confianza en una marca, la estética, el precio... Pero también es muy importante, y cada vez más, el consumo. Pero los consumos declarados por los fabricantes no son reales. Las grandes marcas rebajan los consumos entre un 25 y un 30%, aunque los que menos nos engañan tampoco es que afinen mucho: se desvían un 15%. Esa desviación puede suponer un extra de unos 300 euros anuales de media por ese desvío.
Comentarios
El mismo coche tiene consumos muy distintos según quién sea el conductor. Yo siempre alcanzo los consumos medios 'del engaño' porque hago conducción moderada, sin acelerones y aprovechando las marchas al máximo. Los fabricantes no tienen la culpa de que haya imbéciles que aceleran a tope para llegar antes al semáforo en rojo y que encima esperan que les salga gratis.
#1 Eso está claro, sin duda. Pero también es cierto que la "norma" es declarar un consuno muy llamativo que luego en condiciones "reales" no es posible mantener.
#2 ¿Condiciones reales? Claro, no me acordaba de que yo conduzco en condiciones ficticias .
Hasta el más necio da por entendido que los consumos anunciados no son para conducción deportiva, 'brazo por fuera style' y aire acondicionado sino para un estilo económico. Si cumples las limitaciones de velocidad y aprovechas las marchas puedes hasta bajar del consumo anunciado. El mío personal tiene un consumo teórico de 4,5 y lo he llegado a poner en 4,3 a los 100. Conduciendo en toda clase de vías y sin pisar huevos, simplemente respetando los máximos de velocidad y aprovechando a tope las inercias del motor.
#3 Venga; no saques de contexto mis palabras. Condiciones reales son las que uno tiene que afrontar día a día, con acelerones, frenazos, condiciones climatológicas adversas, imprevistos, prisas… y no las ideales de una prueba de laboratorio o de circuito, ni las del conductor responsable que pareces ser. Solo enlazo la queja de un programa de defensa del consumidor.