Dice Luis Callejón, máximo responsable del Palacio de Congresos de Torremolinos, que su abuelo le dio una vez un manual. Y que éste, si se dedicaba a la política, le garantizaba poder hacer un discurso de más de 10 horas sin insultar a los adversarios. "En el fondo creo que es lo mejor. Ahora las palabras de los políticos sólo incitan a la crispación, sólo quieren hacer sangre y eso no puede ser", afirma Callejón, que denomina al documento Manual para políticos principiantes.
Comentarios
#1 Basta con utilizar palabras rimbombantes, que suenen bién, pero que no aporten información. Coger una idea sencilla o hueca y contarla una y otra vez de distintas maneras. Marear la perdiz. Hablar sin decir nada. Recalcar las obviedades. Y así sucesivamente (algo así como lo que hacía en los exámenes de filosofía del instituto).
Aquí tienes un ejemplo:
http://endrino.pntic.mec.es/mrid0006/C%F3mo%20hablar%202%20horas%20sin%20decir%20nada.htm
Leí el artículo pero no entendí el principio ¿alguien me da un ejemplo?