Primero está el tamaño o la medida de las cosas. Sin un sentido de las medidas, las imágenes parecen ambiguas. A vista de pájaro, una célula de mamífero o una galaxia son la una demasiado pequeña y la otra demasiado grande para impresionar a nadie. Magnificando la foto, se pueden ver más cosas, pero seguirá siendo difícil diferenciar la célula de la galaxia. Nuestra reacción de miedo frente a un depredador como un oso polar o de afecto frente a un ciervo depende de haber podido medir su tamaño y compararlo con el nuestro.
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Creo que: El tamaño sensible de las emociones
El tamaño sensible de las emociones
eduardpunset.esLos chicos dicen que no influye...