Cuanta vergüenza y cuanto dolor.
Terrible. Malditos sean los asesinos que han propiciado esto, y al capitán sin corazón que no quiso ayudarlos.
Comentarios
Cuanta vergüenza y cuanto dolor.
Terrible. Malditos sean los asesinos que han propiciado esto, y al capitán sin corazón que no quiso ayudarlos.