Tras la última sentencia del Constitucional que no ha podido declarar la inconstitucionalidad del despido de la profesora que había rehecho su vida después de haberse divorciado,Las CCP, convencidas de que estos hechos no hacen sino trasladar a la Iglesia el lamentable clima de crispación social al que nos están abocando los dos principales partidos, aunque mucho más el PP, queremos manifestar, que el verdadero problema que subyace y provoca estas tensiones no es otro que los trasnochados acuerdos Iglesia Estado de 1976 y 1979.