Hace 17 años | Por Cachanchan a canarias7.es
Publicado hace 17 años por Cachanchan a canarias7.es

Es un hecho probado que la prisa en los viajes largos no beneficia a la conducción. Pero si además los conductores apresurados no paran ni para estirar las piernas, entonces la posibilidad de sufrir un accidente se multiplica de forma exponencial.