Ya hablamos en su momento de Hennig Brand, un comerciante alemán al que la dote de su esposa le permitió dedicar su tiempo al noble arte de la alquimia para destilar orina y conseguir oro... hoy toca con el trigo.
un comerciante alemán al que la dote de su esposa le permitió dedicar su tiempo al noble arte de la alquimia para destilar orina y conseguir oro Cruzcampo
Comentarios
Eso ya existe, y se llama Franziskaner
#1 No son los bio-diesels
un comerciante alemán al que la dote de su esposa le permitió dedicar su tiempo al noble arte de la alquimia para destilar orina y conseguir
oroCruzcampo