Las repercusiones de la crisis son insondables. Las dificultades económicas derivadas de la actual coyuntura no sólo alcanzan a los diferentes sectores del mercado, sino también a la vida personal de muchos matrimonios. Uno de esos efectos colaterales en el ámbito privado se constata en el descenso del número de divorcios y separaciones en La Rioja (se han reducido en un 60%) motivado, principalmente, por las dificultades financieras para afrontar los gastos legales y las cargas financieras que acarrea una ruptura matrimonial.