Muamar el Gadafi, dictador de Libia, es un personaje excéntrico y trastornado. No sólo ha mandado bombardear a su pueblo tras una protesta; todo lo que hace borda lo surrealista. Desde presentarse en una visita en el extranjero con un grupo de jóvenes vírgenes como escolta a comparecer en un acto oficial vestido con zapatos de tacón. Una excentricidad que han hererado sus hijos. Uno de ellos, Al Saadi Gadafi (Tripoli, 1973) soñó con jugar la Champions League; y casi lo consigue. Tras formarse como jugador en su país y debutar con la selección