Más de 1,1 millones de personas, el equivalente al 43,7% de los más de 2,6 millones de desempleados que estaban registrados en el Inem a finales de septiembre, tenían pocas o muy pocas probabilidades estadísticas de encontrar un empleo, según el índice de ocupabilidad de los parados registrados que elabora el Ministerio de Trabajo