Publicado hace 11 años por AteosdelDeporte a ateosdeldeporte.com

Durante más de dos décadas, la casa de David Barrufet no tuvo puertas, ni ventanas ni calefacción, solamente tres postes y una red. Aun así, con su mono amarillo de trabajo y con el mítico “16” a la espalda, quiso defenderla con uñas y dientes, y no lo hizo del todo mal: sus más de 70 títulos con el equipo de balonmano del F. C. Barcelona le dan la razón.

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berzasnon

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