Una de las críticas más repetidas es que profundamente injusto que en esta crisis estén pagando justos por pecadores: si los políticos europeos y los barones financieros fueron los que metieron la pata, es inmoral que la clase obrera y la clase media de los países de la periferia europea se coman todo el marrón. ¿Es eso cierto? Volvamos, entonces, allá por el 2005.
Comentarios
Estoy de acuerdo... discúlpenme por ello.