Fue entre 2008 y 2012 cuando el pasivo de estas instituciones pasó de suponer un monto de 4.826 millones de euros a engrandecerse hasta sumar los 6.467 millones con los que el conjunto de las Diputaciones (y los cabildos y consejos, sus equivalentes en los dos archipiélagos) terminó el año pasado de acuerdo con los balances que maneja el Ministerio de Hacienda.