Como un Califa del Bagdad de las Mil y Una Noches, gran Harún Al-Raschid comendador de los creyentes, YO también he de disfrazarme de mendigo para arrastrarme por la ciudad en sus pasadizos más pestíferos y repugnantes, para untarme en las grescas de las prostitutas y en los mercados ilegales de armas, oro robado, desperdicios o sustancias mágicas...
Comentarios
SPAM @pacobello
varia tus fuentes