Los Verdes europeos lanzan esta denuncia que documentan con cifras. El traslado, una vez al mes, de parlamentarios, consejeros, intérpretes y periodistas, entre Bruselas y Estrasburgo, representa un vertido anual de vente mil doscientas sesenta y ocho toneladas de CO2, a la atmósfera; según un estudio elaborado por este grupo político. (Hay una iniciativa para solicitar el establecimiento de una única sede: http://oneseat.eu).