EEUU se empecina en actuar en el ámbito geofinanciero como la otrora unipolar superpotencia multidimensional que fue, donde todavía ejerce su proclividad unilateralista al manejarse sólo en forma egoísta como si los restantes 191 países de la ONU no existiesen. No será sencillo en el seno del G-20 desplazar al dólar de su primer sitial geofinanciero que aún ocupa omo divisa de reserva global, ya no se diga por el G-77, de los Países No-Alineados, quienes resucitaron en forma timorata en la cumbre fallida de Copenhague.
Comentarios
El billete de 50 euros. Qué cabrón.
Lo peor no es que no alcance para pillarte una buena borrachera o comprarte una camisa de Emidio Tucci. Es lo penoso del acto de pagar con ese cautivador papel amarillo que nunca te encontrarás en la acera pero sí perderás alguna vez. Esa ceremoniosa escena.
Los comerciantes lo van observando por el rabillo del ojo, así de tapadillo, mientras te lo cogen, lo escrutan, lo acarician y finalmente lo arrugan a conciencia mientras lo van metiendo en la caja (suena en estéreo, es como un risss rasss risss rasss).
Por supuesto, nunca te librarás de un conziencudo examen visual o el mítico -"¿no tienes nada más pequeño?".
-"No señor/a" - te gustaría responder. -"No tengo nada más pequeño".