Hace 12 años | Por weezer a elmundo.es
Publicado hace 12 años por weezer a elmundo.es

Cuando las fuerzas sirias dispararon ametralladoras y cohetes en su barrio, Um Mohamed sólo oraba por su hijo, un soldado del ejército sirio, que teme puedan matarle. Los violentos combates que se viven desde hace una semana en Alepo son horribles, dice esta madre, pero el tormento psicológico es peor. Todos los días se enfrenta a la realidad de que su hijo, de 20 años, forma parte del ejército que espera derrotar a los rebeldes.