La histórica huelga de estudiantes está lesionando el derecho a la educación y, además, genera numerosas situaciones perniciosas como la suspensión de exámenes o prácticas. «La libertad del que así lo quiere debería acabar donde empieza la mía, para asistir a clase, hacer mis parciales y, sobre todo, recibir un servicio por el que he pagado». Con esta frase de una carta enviada por una alumna a la Asociación «Despierta» de la Universidad de Sevilla, se resume el sentir de todos aquellos que critican el brutal parón académico de dos semanas.
Comentarios
Hay que ser esquirol y pelota !!!