Era obeso y la empresa para la que trabajaba lo despidió porque dejó de considerarle “apto” para el puesto, así que llevó el caso ante juez y este sentenció que se había producido un caso de “discriminación” y “vulneración” del principio de igualdad. Declaró nulo el despido y obligó a la readmisión del empleado. J. S. trabajaba en el servicio de tierra del aeropuerto alicantino de L’Altet como fijo discontinuo por 670 euros mensuales (prorrateo de pagas extras incluidas) y un año le comunicaron que ya no contaban con él...
Comentarios
#3 #4 Iros a un hotel!!!
AQUI ESTOY
#1 ¿Dirás "aquí" no?
#2 eres así con todo el mundo? no tienes novia, verdad?
#3 No, solo soy así con los que lo piden a gritos.
Y si, tengo novia, lo siento.