Hace 11 años | Por asvalty a elcorreo.com
Publicado hace 11 años por asvalty a elcorreo.com

Un aficionado británico que había programado sus vacaciones laborales durante los Juegos Olímpicos para poder asistir a todos los días de competición murió el viernes de un ataque cardíaco en el velódromo Stratford, cuando el equipo de persecución local batió el récord del mundo y se llevó el oro.