3 altos mandos del ejército checo, incluyendo un miembro del consejo presidencial y un representante ante la OTAN, fueron forzados a abandonar el ejercito en 2009 después de que el contraespionaje checo descubriera las actividades de un espía ruso que logró cotacto con información del alto mando, ha revelado este martes el diario Mlada Fronta Dnes.
Tres generales chechos, incluido un miembro del consejo presidencial, y un representante ante la OTAN, fueron forzados a abandonar el ejército en 2009 después de que un espía ruso contactara con sus oficinas, ha informado un periódico checo este martes.
Militares checos y agentes de contra-inteligencia han subrayado la creciente presencia de agentes rusos en este miebro centro europeo de la OTAN y de la UE, este ha sido el mayor caso de infiltración militar que se ha notificado.
Citando una fuente anónima, el diario Mlada Fronta Dnes dijo que el agente ruso, un psicologo empleado del estado checo conocido como Robert R., confraternizó con una mayor del ejercito que también estudiaba psicología, y trabajó posteriormente como directora de la oficina de los tres generales del ejercito.
Los generales, respectivamente, trabajaron como consejero de la oficina militar del Presidente Vaclav Klaus, representante ante la OTAN en Europa, y segundo del Jefe del Estado Mayor.
El periódico dijo que no estaba claro si la mayor del ejercito trabajó para el agente ruso conscientemente, tampoco que información fue pasada y si representa una amenaza de seguridad. Los agentes de inteligencia militar siguieron a ambos durante al menos 5 años.
El agente voló a Rusia y la mayor abandonó el ejército.
Josef Sedlak, el general que perdió su posición como representante ante la OTAN, dijo a Mlada Fronta Dnes que sintió que había sido injustamente tratado.
"Si existe alguna información que muestre que alguno de mis colegas estaba en contacto con el espía, entonces la agencia debería habermelo dicho para que me protegiera. Y no seguirme como a algun villano" se le ha citado.
El periódico dijo que otro de los generales se apartó por el desacuerdo acerca de cambios que se estaban haciendo en el ejército, mientras que el tercer general no pudo ser localizado por el diario.
El Ministro de Defensa y la agencia BIS de contra-inteligencia declinaron hacer comentarios.
BIS informó el mes pasado que espías rusos estaban incrementando su actividad en la República Checa y enfocando su atención en actividades del sector energético.
BIS dijo que la presencia de miembros operativos de la inteligencia rusa entre académicos y estudiantes presenta un problema potencial para los antiguos estados satelite soviéticos.
Los chechos están también recelosos de su dependencia en el sector energético de la potencia de la guerra fría que es Rusia. La rusa Atomstroyexport está entre los tres postores a amplíar la mayor planta nuclear del país en Temelin.
El año pasado, la República checa expulsó a dos diplomáticos rusos, incluído el segundo de agregado militar, bajo sospecha de espionaje.
Comentarios
Traducido:
Tres generales chechos, incluido un miembro del consejo presidencial, y un representante ante la OTAN, fueron forzados a abandonar el ejército en 2009 después de que un espía ruso contactara con sus oficinas, ha informado un periódico checo este martes.
Militares checos y agentes de contra-inteligencia han subrayado la creciente presencia de agentes rusos en este miebro centro europeo de la OTAN y de la UE, este ha sido el mayor caso de infiltración militar que se ha notificado.
Citando una fuente anónima, el diario Mlada Fronta Dnes dijo que el agente ruso, un psicologo empleado del estado checo conocido como Robert R., confraternizó con una mayor del ejercito que también estudiaba psicología, y trabajó posteriormente como directora de la oficina de los tres generales del ejercito.
Los generales, respectivamente, trabajaron como consejero de la oficina militar del Presidente Vaclav Klaus, representante ante la OTAN en Europa, y segundo del Jefe del Estado Mayor.
El periódico dijo que no estaba claro si la mayor del ejercito trabajó para el agente ruso conscientemente, tampoco que información fue pasada y si representa una amenaza de seguridad. Los agentes de inteligencia militar siguieron a ambos durante al menos 5 años.
El agente voló a Rusia y la mayor abandonó el ejército.
Josef Sedlak, el general que perdió su posición como representante ante la OTAN, dijo a Mlada Fronta Dnes que sintió que había sido injustamente tratado.
"Si existe alguna información que muestre que alguno de mis colegas estaba en contacto con el espía, entonces la agencia debería habermelo dicho para que me protegiera. Y no seguirme como a algun villano" se le ha citado.
El periódico dijo que otro de los generales se apartó por el desacuerdo acerca de cambios que se estaban haciendo en el ejército, mientras que el tercer general no pudo ser localizado por el diario.
El Ministro de Defensa y la agencia BIS de contra-inteligencia declinaron hacer comentarios.
BIS informó el mes pasado que espías rusos estaban incrementando su actividad en la República Checa y enfocando su atención en actividades del sector energético.
BIS dijo que la presencia de miembros operativos de la inteligencia rusa entre académicos y estudiantes presenta un problema potencial para los antiguos estados satelite soviéticos.
Los chechos están también recelosos de su dependencia en el sector energético de la potencia de la guerra fría que es Rusia. La rusa Atomstroyexport está entre los tres postores a amplíar la mayor planta nuclear del país en Temelin.
El año pasado, la República checa expulsó a dos diplomáticos rusos, incluído el segundo de agregado militar, bajo sospecha de espionaje.