El gran drama europeo (al menos lo más urgente y estructural), no es el económico, ni el financiero, ni siquiera el ecológico (siendo todos ellos claves y dramáticos), el gran drama es el déficit democrático, o mejor dicho, la falta de credibilidad democrática de quienes comandan el proceso.
Comentarios
No preocuparse, para eso se ha invertido mas en las fuerzas antidisturbios, para encarrilarnos por el camino correcto.
Con sangre entra