Hace 13 años | Por sunes a lens.blogs.nytimes.com
Publicado hace 13 años por sunes a lens.blogs.nytimes.com

Igual que la gente, los perros se hacen viejos. Sus ojos se vuelven cansados, sus cuerpos están doloridos. Pero a diferencia de las personas, ellos lo viven con una bendita ignorancia canina. O al menos eso le pareció a Nancy LeVine mientras miraba a sus mascotas, Lulu y Maxie, entrar en sus años dorados. Las envejecidas hermanas fueron el objetivo del primer libro de su dueña: "A Dog’s Book of Truths"; y la inspiración tras un esfuerzo de ocho años: "Senior Dogs Across America".