Según el historiador europeo Cha Caruthers, “ Franco usó su poder en el mundo del cine para mostrar lo que él quería en su país—un país de una gente unida, de una religión, un idioma, y una tierra. Por ello llevó a la gran pantalla películas que consideraba española, como Raza, cuyo guión fue escrito por el propio dictador bajo el seudónimo “Jaime de Andrade”.