Un juez de Nueva York ha declarado ilegal que los particulares alquilen habitaciones a través de internet. Quebec también promueve una limitación. Barcelona y Río pactan acuerdos. Airbnb no es la única que ofrece alquileres entre particulares, pero sí la más especializada en estancias de uno o varios días. “No es lógico que en este contexto se estrangule más al ciudadano, sobre todo con el parque de viviendas vacías que hay”, explica Kuehne.
Comentarios
Muy bien hecho. ¿Dónde se ha visto que los ciudadanos dispongan libremente de sus propiedades y hagan competencia a los honrados hosteleros?
¡Viva el libegalimo! (de pacotilla)