La capacidad de los robots submarinos para manipular patatas calientes (por donde mana crudo a chorros) está siendo puesta en tela de juicio en el Golfo de México. Parece que los futuristas mecanismos tele-manipulados por los ingenieros no pueden hacerse cargo de la tarea de cerrar la fuga por sus propios medios. Igual estos mismos ingenieros deberían volver la vista atrás y recordar con añoranza el teléfono de Handyman, el considerado primer brazo (o par de brazos) robótico realmente funcional de la historia...
Comentarios
la fiesta si que es delicada
vámonos de farra.