Francesca de Habsburgo (Suiza, 1958) es una coleccionista atípica, que no entiende el arte como una inversión, sino como una forma distinta de interpretar el mundo. Su padre, el barón Thyssen, le inculcó ese respeto por el proceso creativo, que ella ha ido cultivando con rebeldía juvenil.
Comentarios
Mejor eso que no salir a la caza del judio en los jardines de casa. Vaya familia!
Di que sí Franchescaaa!!! Respeto por el proceso creativo!!!!
El arte no es un negocio, el arte es arte y los negocios son los negocios!