El propósito de esta noticia es enseñar y/o recordar lo importante que es el uso diario del hilo dental. Cepillarse los dientes de forma adecuada y con regularidad ayuda a eliminar la mayor parte de la placa dental, sin embargo, el cepillado sólo no puede eliminar la placa localizada en lugares que el cepillo no puede alcanzar, especialmente en los espacios entre los dientes. Asi evitamos caries y prevenimos la halitosis. Además esta página nos enseña su uso correcto.
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Soy Odontólogo en Madrid, ejerciendo mi profesión hace ya 26 años. A los que un día conocí como niños pequeños, ahora son adultos que se desempeñan en todos los ámbitos de la Sociedad Española. No es mi ánimo ser cansino en mis opiniones, pero creo que es muy importante enseñar a la sociedad donde vivo lo importante que es la salud bucal. Por esto, cada cierto tiempo gasto parte de mi tiempo recordándole a los que me quieran oír la importancia de utilizar elementos complementarios del cepillado bucal en nuestro aseo diario. El hilo dental es nuestro olvidado amigo que nos ayudará a evitar las temibles caries interdentales que sólo son detectables con radiografías (y son temibles porque no se detectan a simple vista hasta cuando ya es demasiado tarde) que desembocan en la mayoría de las veces en tratamientos de conducto (endodoncias) que se podrían haber evitado si hubiese existido el hábito del uso diario del hilo dental. También la halitosis bucal es la consecuencia de no usar algún dispositivo para limpiar entre dientes. Sobre esto último cabe recordar que la halitosis es un problema social, pues quien la padece ( en la mayoría de los casos) no sabe que tiene halitosis, pues la mucosa olfativa se acostumbra a los olores sean buenos o malos. Solamente se dan cuenta de ello quienes están a nuestro alrededor (nuestros amigos, nuestra pareja), y si es un desconocido se podría llevar una mala impresión de nuestra persona que difícilmente podremos remediar. Por este motivo les deseo recordar a quienes lean esta líneas lo muy importante que es usar el hilo dental en nuestro aseo diario. Para aquellos que suelen comentar que le es incómodo, o que no les entra en todos los espacios interdentales, pueden ayudarse con un irrigador bucal, una ducha de agua a presión que tiene la ventaja de no atascarse ni enredarse entre los dientes.