La Iglesia Católica mexicana ha denunciado en varias ocasiones que muchos sacerdotes viven bajo la amenaza del narcotráfico. Ahora también reconoce que "el poder corruptor" pudo llegar a algunos templos y que no hay forma de controlar la construcción de capillas financiados con dinero procedente del narcotráfico.
Comentarios
La Iglesia, como siempre, cerca de los más necesitados...
#1 Si, donde hay pelas ahí está la iglesia católica.