Se les atribuyen, dijo, poderes y fuerzas ocultas, que protegen de maleficios o robos a las personas o familias "propietarias". Éstas deben retribuirles con varias ofrendas (coca, cigarrillos, bebidas y otros), declaró. En el día de las ñatitas, una semana después del día de difuntos, el 8 de noviembre, se les debe llevar a "escuchar misa". Posteriormente se les festeja con amigos y vecinos en los llamados prestes.
Comentarios
Venerar a los santos, también es incompatible con el cristianismo.
Y a las estatuas.
Y a los edificios.
Y a simbolos y estampitas.
Peeero...
¡Pero si en todas las catedrales hay una colección de huesos de santos!
Un desagradable ejemplo en El Escorial
http://www.elpais.com/articulo/madrid/Descenso/entranas/monasterio/elpepuespmad/20070923elpmad_13/Tes