Hace 12 años | Por --51656-- a diariodecuba.com
Publicado hace 12 años por --51656-- a diariodecuba.com

Una "balita" de dos litros —un envase plástico de Coca Cola— es lo que las autoridades penitenciaras entregaban diariamente a Víctor Campa para beber, bañarse y lavar la ropa. En la cárcel de Aguadores, donde el preso político Wilman Villar Mendoza enfermó de neumonía y empezó un ayuno que le llevaría a la muerte, el agua es el bien de consumo más codiciado. La fama de Aguadores supera su jurisdicción. Desde Boniato (en teoría, una cárcel de mayor pedigrí) envían allí a los presos más indomables.

Comentarios