¿Se puede servir a la guerra santa desde una prisión? La actividad yihadista de Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah, de 45 años, jefe de Al Qaeda en España condenado a 12 años, no se detuvo pese a estar bajo una vigilancia permanente que incluye cámaras de vídeo y grabaciones telefónicas. El sirio que sembró la semilla de la que se alimentaron los autores del 11-M financió desde la cárcel a células terroristas, según asegura un auto del juez Ismael Moreno, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional.
Comentarios
Ja, ¿pero a esa gente no se le hace un seguimiento y se la vigila? ¿En que estaban pensando?, Ea, ya lo hemos encerrado y listo, menudos chapuzas.