Hace 16 años | Por torolevantado a almendron.com
Publicado hace 16 años por torolevantado a almendron.com

La soledad de un juez que puso un toque de frivolidad a una brillante trayectoria, al permitir que una biografía efectuada por su mujer pusiese en entredicho su discreción y parcialidad. Veamos el análisis de la situación en las líneas de otro juez "estrellado", el juez Gómez de Liaño.

Comentarios

D

Habló de putas...
Es que la gente tiene unos cojones... Le publican un artículo sobre ética a un prevaricador. Salió en El Mundo. Cómo no.