Publicado hace 13 años por kylian a ventana-almundo.blogspot.com

Durante miles de años, peregrinos y comerciantes que transitaban la Ruta de la Seda hacia el oeste, han utilizado el oasis de la Media Luna como última parada antes de enfrentarse a las dificultades del desierto del Gobi. A seis kilómetros de la ciudad de Dunhuang el oasis ha soportado el paso de los milenios. Sin embargo, ahora puede que tenga sus días contados...

Comentarios

D

(...)por un lado, los agricultores locales han abierto canalizaciones para regar sus cultivos, y en segundo lugar la población de Dunhuang se ha visto más que duplicada en este período.
Hasta el desierto se está superpoblando...
Buenísimas fotografías y buen artículo.