Publicado hace 13 años por michaelknight a sporting.elcomerciodigital.com

Corría el primero de marzo. Era 1981. Aunque no había pasado ni una semana del golpe de estado del 23F, no había tensión en el país como para temer un secuestro. Pero el mítico Enrique Castro 'Quini' fue el objetivo de una banda de delincuentes para privarle de la libertad a cambio de un rescate. Mañana se cumplirán 30 años de aquel cruel día, al que siguieron otros 24 más de incertidumbre.