Recuerdo una gran pregunta que me planteó esta obra: si tienes un amigo que es homosexual pero al que le aterroriza que se sepa, ¿deberías declararlo contra su voluntad para evitarle una importante condena durante un juicio? El debate no cesó nunca. Este es uno de los dilemas de "el lector", aunque no aparezcan homosexuales ni precipicios, porque el problema es de otra índole.
Este dilema ya lo vimos en 'La venganza de Don Mendo'. Don Mendo da palabra de protegerla y aunque ella se aprovecha el no puede romper su promesa ya que eso le deshonraria. Los amigos que lo saben podrian hablar, pero don Mendo se lo prohibe.
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Este dilema ya lo vimos en 'La venganza de Don Mendo'. Don Mendo da palabra de protegerla y aunque ella se aprovecha el no puede romper su promesa ya que eso le deshonraria. Los amigos que lo saben podrian hablar, pero don Mendo se lo prohibe.