Las pequeñas manchas aparecidas en el lugar del hundimiento del Prestige , detectadas por el buque Cornide de Saavedra del Instituto Español de Oceanografía (IEO), obliga a variar la periodicidad con la que se visitaba esta zona del océano Atlántico situada a 260 kilómetros de la costa gallega, según confirmaron ayer en el Centro para la Prevención de la Contaminación Marítima (Cepreco). Relacionada El Prestige sigue soltando fuel