El lider brasileño consigue que Bush le roce y no deje mancha, difícil de lograr pero posible. Hay que correr mucho para jugar tenis en ambos lados de la pista a la vez, ser popular, campechano (que palabra fea) y querido por todos y a la vez acercarse a Bush, firmar unos cuantos papelotes y todos contentos y aplaudiendo.
Comentarios
Ya se sabe que ante vampiros y demonios, lo mejor es la cruz.