Hace 11 años | Por --226796-- a lasprovincias.es
Publicado hace 11 años por --226796-- a lasprovincias.es

Isabel se dispone a emprender un nuevo viaje a Etiopía, donde nacieron sus dos hijas adoptivas, las mellizas Cristina y Lorena, que acaban de cumplir tres años. Regresa a Adís Abeba, para encontrarse por primera (y quizás última) vez con la madre biológica de las niñas. No es habitual, más bien todo lo contrario, que una madre adoptiva quiera conocer a la madre que parió a sus hijas y menos aún que contrate a un investigador privado para buscarla en ese inmenso país de 84 millones de almas y que éste consiga localizarla.

Comentarios

sunes

Se me han puesto un poco los pelos de punta... La madre biológica no quería darlas en adopción, pero como no pudo ir a verlas, se las quitaron y las pasaron a un programa internacional de adopciones. Y la señora española que adopta a las niñas, quiere que sus hijas adoptivas sepan de dónde vienen y tal... Muy bonito, hasta que leo el trozo en color gris a la derecha...
"Yo soy su madre, pero quiero que ellas tengan la posibilidad de conocer quién las trajo al mundo y cómo fue el proceso de adopción. " -> Bueno, su madre no es la española, a mi entender... Su madre es una mujer pobre que se quedó sin hijas por no tener ni un duro...

Y ya con ésto... anonadada me hallo... "No pretendo convertirme en la señora que se ocupa de las hijas de otra mujer, ni siquiera tener una relación constante, soy su madre, pero, si Aster quiere, no me cuesta nada mandarle fotos de sus hijas biológicas por su cumpleaños para que vea cómo crecen o cómo progresan. Tampoco me planteo traerla aquí a España o ir de vacaciones, pero eso es una cosa y otra bien distinta que las niñas conozcan quién fue su madre biológica y yo tenga respuestas a todas sus preguntas".

Qué mundo más cruel, y qué poquito piensa la gente en los demás cuando dice cosas como ésta en estas circunstancias