Trabajando como fotoreportero, Marco Amenta tuvo la ocasión de fotografiar o dos prófugos mafiosos. Por supuesto, las fotos nunca fueron publicadas. Este es el riesgo de pasar toda una carrera documentando el crimen organizado en Sicilia. Ahora, el joven fotógrafo se convierte en emergente cineasta y presenta en Nueva York "The sicilian girl", un nuevo alegato anti-mafia con el que prosigue su particular cruzada ante la 'cosa nostra.'
Comentarios
Si es Sicilia no es camorra por lo general...
Perdón, mea culpa por usar los conceptos mafia y camorra como sinónimos.