La proverbial dependencia energética del Estado español, que importa todo el petróleo, el gas natural, el uranio y más del 80% del carbón, unida a la indefinición del Gobierno en su apuesta por las energías renovables llevó al Ministerio de Industria a anunciar una subida excepcional en enero del 10% de la factura de la luz, pero en abril de nuevo han subido los peajes eléctricos.
El 'déficit tarifario', que junto a los peajes, TUR y otras ostias energéticas forman parte de de esas historias que nadie entiende ni sabe de donde vienen ni a donde van pero que permite que algunos saquen una muy lucrosa tajada. Hundida la burbuja inmobiliaria, ahora la energética se presenta como muy prometedora: se puede saquear limpiamente a la vez que negándola, y si algún dia estalla se echa totalmente la culpa al primero que le apetezca al parásito de turno, como ocurre por sistema en todas las burbujas que se precien.
La verdad es que dificilmente las cosas pueden hacerse de forma más enrevesada y manipulada. Aunque cuando en un tema se unen política, poder, dinero y monopolios, lo único que puede esperarse es un repugnante resultado basura ideal para vomitar. Hay cosas que no cambian nunca.
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El 'déficit tarifario', que junto a los peajes, TUR y otras ostias energéticas forman parte de de esas historias que nadie entiende ni sabe de donde vienen ni a donde van pero que permite que algunos saquen una muy lucrosa tajada. Hundida la burbuja inmobiliaria, ahora la energética se presenta como muy prometedora: se puede saquear limpiamente a la vez que negándola, y si algún dia estalla se echa totalmente la culpa al primero que le apetezca al parásito de turno, como ocurre por sistema en todas las burbujas que se precien.
La verdad es que dificilmente las cosas pueden hacerse de forma más enrevesada y manipulada. Aunque cuando en un tema se unen política, poder, dinero y monopolios, lo único que puede esperarse es un repugnante resultado basura ideal para vomitar. Hay cosas que no cambian nunca.