Un escualo muerde a una turista canadiense en Cancún. Por miedo a que la noticia pudiese afectar al turismo, ante la presión de los empresarios de la zona y dada la imposibilidad de ocultar los hechos, el gobierno local autoriza la matanza de tiburones indiscriminada.
Comentarios
Con dos cojones, sí señor. Vamos a acabar con esos hijoputas de los tiburones, que tienen dientes. A por ellos.