Hace 11 años | Por nade a guardian.co.uk
Publicado hace 11 años por nade a guardian.co.uk

Un controvertido hombre de negocios estadounidense ha arrojado alrededor de 100 toneladas de sulfato de hierro en el Océano Pacífico como parte de un plan de geoingeniería en la costa oeste de Canadá en Julio. Recientes imágenes vía satélite confirman sus efectos: un florecimiento artificial de plankton de 10.000 kilómetros cuadrados.