Más de medio millón de empleos fueron protegidos el año pasado por leyes anti-dumping y la aplicación de licencias no automáticas de importación, que impidieron el ingreso masivo de productos a bajo precio por la crisis internacional, según destacaron cifras oficiales. Según documentos del Ministerio de Industria, unos 542.370 puestos de trabajo se vieron resguardados por la aplicación de las licencias no automáticas.