Publicado hace 11 años por Bender_Rodriguez a nationalgeographic.es

Estos animales pueden oler desde pequeñas lagartijas hasta gorilas, detectar dónde crecen plantas invasoras o incluso guiar a biólogos marinos hasta excrementos frescos de ballena. Pero, ¿pueden oler el pasado? El entrenador de perros australiano Gary Jackson, de Multinational K9, ha entrenado a una perra labradora negra llamada Migaloo para ser el primer perro «arqueólogo» del mundo, capaz de localizar huesos de cientos de años de antigüedad.