El dibujante y periodista Antonio Mingote, autor de las ilustraciones del último libro sobre ciencia de José Manuel Sánchez Ron, "El Mundo de Ícaro", recién puesto a la venta, ha dicho a Efe que no hay genialidad en su obra de tantos años, sino "trabajo, dedicación, paciencia, constancia y amor a lo que hace"."El Mundo de Ícaro", de la editorial Crítica, es un libro muy ameno dirigido al gran público, en donde los autores se sumergen en la historia de Leonardo da Vinci, los hermanos Montgolfier, Ferdinand von Zeppelin, Konstantin Tsiolkovsky..
Lo mismo que decía Cela, aunque con otras palabras: "¿Inspiración? ¡Qué coño inspiración! ¡Trabajo, trabajo y trabajo...! A veces se te ocurre algo, a veces no, pero siempre estoy delante de la maquina de escribir."
Aunque evidentemente el trabajo y la paciencia son imprescindibles, creo que hay una gran diferencia entre talento y genialidad.
Se puede forjar un enorme talento, pero con el genio se nace. Y con ello no digo que la gente con talento esté por debajo de la genialidad: no. Todo requiere un desarrollo, sin eso no existe ni el uno ni el otro. Solo es la facilidad, para unos es algo más fácil, aunque no caido del cielo, nada más.
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Lo mismo que decía Cela, aunque con otras palabras: "¿Inspiración? ¡Qué coño inspiración! ¡Trabajo, trabajo y trabajo...! A veces se te ocurre algo, a veces no, pero siempre estoy delante de la maquina de escribir."
El sencillo secreto de los grandes.
Aunque evidentemente el trabajo y la paciencia son imprescindibles, creo que hay una gran diferencia entre talento y genialidad.
Se puede forjar un enorme talento, pero con el genio se nace. Y con ello no digo que la gente con talento esté por debajo de la genialidad: no. Todo requiere un desarrollo, sin eso no existe ni el uno ni el otro. Solo es la facilidad, para unos es algo más fácil, aunque no caido del cielo, nada más.